domingo, 12 de noviembre de 2017

Sola

 Es la primera vez que estoy sola , sin Miss C , sola en casa. Durante cuatro días mi hogar ha sido silencio puro y recogimiento. Y lo mejor ha sido volver a encontrarme conmigo misma y recordar como era todo antes de su llegada.

Mis amistades me preguntaban que iba a hacer con tanto tiempo, que si iba a salir por ahí, al cine, quedar con gente.. pero mi respuesta era No , necesitaba tiempo para mi , necesitaba estar sola.

También me preguntaban si la echaría de menos , algunos insistían en que ellos no podrían separarse de sus hijos e incluso me hicieron sentir mal por ello.

Sin embargo, una vez pasados los cuatro días y a la espera de que lleguen a casa y con ellas la normalidad, puedo decir o mejor GRITAR que me he sentido BIEN. Muy bien en realidad ya que curiosamente he vuelto a descubrir..

El placer del silencio mientras leo un libro a la luz de una vela.

La crema de la ducha reabsorberse lentamente y sin prisas.

La siesta mientras ves una película en silencio y sin saltos en el sofá.

Ir de compras para mí, mirarme y remirarme en el espejo y decidir con tranquilidad si me lo llevo o no!
He vuelto a escuchar y sentir mi voz interna, mis pensamientos, mis ganas de luchar por todo lo que tengo. 
 He rescatado  mi vena creativa y he disfrutado creando pequeños rincones en mi casa en los que disfrutar y crear recuerdos familiares.

He dormido sin interrupciones y a pierna suelta.

He reflexionado sobre mi vida, mi relación de pareja y me he dado cuenta de que debo luchar por ella, cuidarla porque ella lo merece todo. 

He vuelto a mi niñez,  recorrido mi vida mirando fotografías  de mi infancia y actuales que me han hecho ver de donde vengo y plantearme donde voy .

He sentido mi vinculo como madre de Miss C. al dejarla ir , volar, descubrir y divertirse sin mí aceptando que eso es ser madre.

He descubierto la felicidad mirándola a través de los ojos de mi hija en cada una de las fotos o face time que hemos hecho.

He visto la necesidad de cuidarme para cuidar que tanto me decía mi madre y la he recordado llorando en silencio y pensando que ella nunca pudo estar sola ni un solo día para disfrutar como lo he hecho yo esta vez. 

Y me he sentido FELIZ haciendo cada una de estas cosas sin echar de menos a nadie porque lo necesitaba tanto. Y no me siento mal , ni mala madre , ni mala persona.  

Al contrario me siento MUY BIEN  y ya pensando cuando volveré a estar sola de nuevo. 

Por cierto D. gracias
por decirme que no era malo y que lo disfrutara a tope. ¡¡Lo hice!!





4 comentarios:

  1. Nos venden una maternidad edulcorada pero agobiada...yo a veces aún me siento culpable de no despertarme cuando mis hijos llegan de madrugada porque han salido...como si fuese mi obligación de madre perfecta olvidar que ellos han salido a divertirse y yo necesito dormir sin angustias...este verano mi hijo mayor estuvo trabajando en un chiringuito de la costa, y para no ir y volver cada dia a horas intempestivas, alquiló un apartamento con dos amigos más...y la verdad,ver su habitación, que habitualmente es un caos, ordenada y limpia,tener menos ropa que lavar,menos comida por hacer,en suma, más tiempo para mi, sabiendo que él estaba haciendo lo que le gustaba,fue como un bálsamo.Ahora vuelve a estar en casa y me encanta,pero una sana distancia de ve en cuando no va nada mal...para todos.
    un abrazo
    Núria, de títeres sin cabeza

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  2. ¿Sentirse culpable por disfrutar? Nunca.

    Los hijos son lo más importante de nuestra vida y les queremos más que a nada en el mundo. Pero eso no significa que a veces estemos saturadas y echemos de menos algo de tiempo para una misma.

    Tú has podido disfrutar de unos días y los has aprovechado a tope. Eso que te llevas. No permitas que nadie te haga sentir mal por ello.

    Un beso.

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  3. Justo nosotros nos hemos ido por primera vez de viaje de fin de semana solos sin niños estos días! Así que te entiendo perfectamente. Hemos disfrutado muchísimo, hemos recordado quiénes y cómo éramos y nos ha encantado, hemos reconectado como pareja y lo más importante, me he dado cuenta de que me encantaba mi vida de antes, pero de que la de ahora, con mis hijos, me gusta aún más! Me encantaría poder combinarlas ambas, pero si tengo que elegir, me quedo con ellos, con sus risas y sus juegos, en vez de con los musicales y viajes internacionales (que también me chiflan, para qué negarlo!!) Jejejej. Un abrazo grandote!

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  4. Uff!! Que ganitas tengo yo de unos días de soledad. Y de unos días de pareja también. Claro que sí!

    Abrazos!

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